lesiones más comunes verano

Las lesiones más comunes en verano son la combinación entre la práctica ocasional sin experiencia previa. Con la llegada del buen tiempo nos apetece practicar más deporte, incluso aunque no lo hagamos el resto del año.

Es cierto que muchas de estas lesiones pueden evitarse encargando unas plantillas ortopédicas a medida en Madrid, en nuestra clínica. Una mala pisada junto con un calzado inadecuado son el tándem ideal para las lesiones.

¿Cuáles son las lesiones más comunes en verano?

Los esguinces de tobillo encabezan esta lista, producidos por los juegos en la piscina, salir a correr por cualquier terreno y hacer largas rutas en bici sin preparación. Pies, tobillos, columna, cervicales y rodillas son las demás zonas del cuerpo que más sufren en esta época del año. 

Desde nuestro servicio de fisioterapia y podología podemos decir que las lesiones más típicas en esta época son:

  • Esguince de tobillo: es bastante habitual cuando utilizamos las chanclas como calzado habitual, ya que no sujetan el pie correctamente. La práctica de deportes con impacto también puede ser una causa.
  • Metatarsalgia: es la inflamación en el metatarso (la almohadilla que precede a los dedos de los pies). El uso de calzado ajustado como sandalias y bailarinas puede provocarlo. Los deportes que requieren correr y saltar también propician su aparición.
  • Tendinitis: es la inflamación de los tejidos que unen huesos y músculos. Lo más común es que se produzca por sobreesfuerzo. Practicar deporte con más intensidad o durante más tiempo del habitual es la principal causa.
  • Columna y cervicales: si no tenemos suficiente práctica en ciertos deportes o no los practicamos con prudencia, podemos hacernos mucho daño. Además, la falta de plantillas adaptadas que equilibren nuestra pisada puede transmitir el dolor hacia estas zonas.
  • Lesión muscular: se producen por sobrecarga. Prácticas como la natación o el pádel sin regularidad ni calentamiento pueden provocarla.
  • Dolor lumbar: no solo aparece por exceso de ejercicio, sino por permanecer demasiado tiempo tumbados y en mala posición.

¿Podemos prevenirlas?

Por supuesto, la prevención es siempre el mejor tratamiento. Si quieres evitar las lesiones más comunes en verano:

  • Haz ejercicio pero de manera progresiva, acorde a tu capacidad.
  • Realiza un calentamiento previo y estiramientos posteriores.
  • Utiliza el equipamiento adecuado a cada actividad, especialmente el calzado.
  • Mantente hidratado/a durante la práctica y utiliza protección solar para evitar quemaduras en la piel.
  • Si tu pisada no es la correcta o tienes dolor al caminar, acude a consulta para que valoremos tu caso de manera individual y encontremos la solución que mejor se adapta a tus necesidades.