arco plantar

¿Qué es el arco plantar? ¿Qué problemas pueden presentarse en esta parte del pie? ¿Cómo tratarlos? Resolvemos todas estas cuestiones en las siguientes líneas. 

Cuando hablamos del arco plantar nos referimos a la zona del pie encargada de soportar y equilibrar las cargas al caminar o correr. En colaboración con los huesos y los músculos, esta zona, también conocida como bóveda plantar, es la composición de varias estructuras que pueden verse afectadas por distintos problemas, muchos de ellos tratables con fisioterapia.

Los músculos del arco plantar

Desde un punto de vista anatómico, el arco plantar lo conforman dos piezas. Hablamos de la parte interna y de la parte externa. En estas encontramos varios músculos: el tibial posterior, el peroneo lateral largo, el tibial anterior, el flexor del dedo gordo y los plantares cortos.

Aparte de estos músculos, esta zona de los pies también está formada por:

  • El ligamento plantar.
  • El tarsometatarsiano plantar.
  • El calcaneoescafoideo. 
  • La aponeurosis plantar.

Todas las partes anteriores tienen un claro cometido: mantener unidos todos los huesos implicados. 

¿Dónde está el arco plantar?

Esta zona se localiza en el área media e inferior del pie. Gracias al arco plantas, somos capaces de apoyar y distribuir de forma correcta las cargas.

Debido a la presencia de tejidos como ligamentos y tendones plantares, la curva no se modifica al agregar cargas al caminar. Para tener clara la función del arco plantar, hay que tener en cuenta que, además de los músculos y ligamentos que acabamos de citar, tenemos también los huesos calcáneo, astrágalo, los tres cuneiformes, el cuboides y los metatarsianos. Todos contribuyen al apoyo y a actuar de forma efectiva durante los movimientos.

En definitiva, la función del arco plantar como estructura anatómica es generar y complementar los movimientos del músculo y lograr una distribución de la carga mejor. Los problemas en el arco plantar puede deberse a varios motivos como por ejemplo los de tipo neurológico. Ahí podemos encontrarnos con un caso de pie plano o pie cavo. En el primer caso, se debe a un aumento de la bóveda. En el segundo, a la disminución del arco plantar. A veces al pie cavo se suman los dedos en garra. Sea como sea, cada caso habrá de ser valorado por un especialista. En todo caso, ante lesiones en el arco plantar que sean dolorosas habrá que diseñar un tratamiento enfocado a disminuir el dolor y las deformidades. Siempre, como no, apostando por un calzado adecuado para cada tipo de pie. La fisioterapia es casi siempre el camino más efectivo para recuperar la funcionalidad de los pies y los dedos. Pero el calzado, recuerda, es determinante. Tengamos o no problemas en el arco plantar.