La falta de uñas no es muy común, pero sí resulta desafiante. Hoy te explicamos qué es la anoniquia y qué tratamiento se aplica en estos casos.
Son muchas las afecciones que tratamos en nuestra clínica. Algunas son muy comunes, como el tratamiento de la fascitis plantar en Madrid, y otras son más raras como la que te presentamos hoy. Por supuesto, que sea menos habitual no significa que no exista solución.
Anoniquia y tratamiento: las claves para comprenderlo
La anoniquia es la falta de uñas. Puede ser en pies y manos pero, en este caso, nos vamos a centrar en los pies porque son nuestro campo de especialización.
Esta enfermedad congénita no es dolorosa per se, ya que las personas que la padecen simplemente nacen con piel donde debería haber uñas. En caso de que la pérdida ocurra por otras razones, entonces sí podemos encontrar molestias o problemas que solucionar.
Esta rara condición puede tener relación con otros síndromes y enfermedades o darse por sí sola. En este caso se la conoce como anoniquia congénita simple.
¿A qué se debe?
Son tres factores principales los que determinan la aparición de la falta de uñas:
- Factores genéticos
- Traumatismos
- Infecciones persistentes o enfermedades subyacentes
Hay casos de anoniquia genética que se presentan desde el nacimiento y otros que pueden desarrollarse por lesiones o afecciones específicas.
5 tipos de anoniquia
Hay cinco variantes de esta condición que podemos encontrar en consulta y que son las siguientes:
- Anoniquia total: es la ausencia completa de uñas.
- Parcial: es la ausencia de solo algunas de ellas. Aunque solo haya una uña, ya la consideramos parcial.
- Congénita: es la que se presenta desde el nacimiento.
- Traumática: puede surgir si las uñas sufren impactos severos y/o continuados.
- Por infección: los hongos persistentes, y otras enfermedades dermatológicas, pueden producir la anoniquia de nuestras uñas.
¿Puede tratarse?
La anoniquia resultado de traumatismos e infecciones puede suponer un problema, ya que esa parte en la que falta la uña queda desprotegida.
Las personas que presentan esta anomalía de nacimiento, no presentan ese problema, pues donde debería haber una uña existe piel que protege el dedo.
Otra de las molestias que puede generar la anoniquia es la estética. No podemos subestimar el impacto psicológico que este tipo de afecciones pueden tener en el paciente.
- En este caso se recurre a uñas artificiales, aunque no siempre es una solución posible.
- En casos de anoniquia congénita, no existe un tratamiento como tal. Lo que se hace es acompañar y asesorar al paciente sobre cómo cuidar sus pies para prevenir complicaciones.
- En los casos de anoniquia adquirida, pueden emplearse terapias tópicas para infecciones e incluso intervenciones quirúrgicas en los casos más severos.
Si padeces anoniquia, el tratamiento lo determinaremos tras un examen del estado de tus pies que nos permita emitir un buen diagnóstico. A partir de ahí procederemos con el tratamiento más adecuado.
